¿Alguna vez has tenido que dejar de hacer un proyecto que te ilusiona, pero cuyos resultados pueden ser no tan prometedores? ¿Sientes seguridad al discutir tus resultados con compañeros y colaboradores? ¿Cómo describirías la cultura de tu departamento?

Tras nuestro último evento en junio con profesionales de la psicología y neurociencia sabemos que las dinámicas emocionales afectan nuestra motivación, salud, comunicación y toma de decisiones en nuestro trabajo.

Ahora, queremos empezar el curso académico hablando sobre cómo las dinámicas emocionales afectan a la carrera científica en particular.

Para ello contaremos con la Dra. Jennifer M. Heemstra, investigadora en la Universidad de Emory y defensora en redes sociales de la salud mental en el laboratorio, y la Dra. Ellen Wehrens, investigadora en el Centro de Oncología Pediátrica Princesa Máxima y encargada del proyecto “Laboratorio feliz” en el grupo de investigación de la Dra. Anne Ríos.

Desde la experiencia de estas dos investigadoras, trataremos temas como:

● Es común oír que de los errores se aprende, pero en cambio los fallos tienden a invisibilizarse en la academia al poder considerarse fracasos. Sin embargo, es esencial para seguir creciendo y mejorar. ¿Cómo se puede normalizar el exponer estos fallos como algo positivo en la academia que permite el progreso?

● Tras el último año, investigadores de todo el mundo se han dado cuenta de que se encontraban en una situación de estrés y ansiedad sin darse cuenta. ¿Cómo se puede aplicar un programa de “laboratorio feliz” para detectar y solventar estos problemas? ¿El riesgo coste-beneficio es positivo?

● Cada vez contamos en la comunidad científica con divulgadores que visualizan los problemas asociados a la investigación académica como los anteriores, y que promueven propuestas para mejorar la rutina de los investigadores. ¿Qué cambios se están llevando a cabo para conseguir una ciencia con calidad a nivel personal? ¿Cómo conseguir que se universalice para que siga creciendo toda la comunidad científica?